Sus síntomas se caracterizan por: esputo teñido de sangre, tos seca, fatiga, fiebre acompañada de escalofríos, dolor de cabeza, dolores articulares, dolores musculares y dificultad para respirar. La enfermedad puede cursar de forma inaparente, leve, moderada o grave.
El médico la puede diagnosticar si detecta estertores o disminución de los ruidos respiratorios. Junto a esto se puede realizar el recuento del número de annticuerpos, hemocultivo, gasometría arterial, tomografía computarizada del tórax, el cultivo de esputo y radiografía del tórax.
Una vez diagnosticada la enfermedad el médico recetará al paciente antibióticos durante 14 días.
No existen vacunas para prevenir esta enfermedad y además no crean inmunidad. Esto quiere decir que una persona puede infectarse más de una vez durante su vida.
Se aconseja:
- No capturar aves y pájaros silvestres ni comprarlos en la vía pública.
- Mantener las aves en lugares ventilados y con espacio suficiente.
- Alimentar a los pájaros correctamente y mantener las jaulas limpias.
- No permanecer largos periodos en habbitaciones cerradas donde haya aves.
- No introducir aves recientemente capturadas o comprarlas sin certificado sanitario en jaulas donde ya hay otras aves.
No hay comentarios:
Publicar un comentario